A pesar de sus tendencias agresivas, se vuelca mucho en la cría de su progenie.

Este Tyrannosaurus Rex luce una gran cantidad de cicatrices, que son el testamento de numerosas batallas feroces contra otros dinosaurios.

Su comportamiento es sorprendentemente agresivo y requiere de protocolos especiales dentro del parque.

Se ha descubierto que este dinosaurio tiene unos niveles de inteligencia sorprendentes. Es capaz de reconocer caras y personas.